La cama de tu casa no lo es todo en una relación sexual. Existen otros lugares que son ideales y sobretodo, se dice, que los ideales son aquellos en los que se reúnen tres elementos: adrenalina, sorpresa y sexo emocionante. Los moteles del amor pueden ser el lugar perfecto para un sexo fuera de serie.

El uso de los hoteles de paso poco a poco ha dejado de ser un tabú, ya que al surgir la categoría de Love Hotel, se quita el estigma de que son lugares malos, de giros negros, etc. En un Love Hotel se va a hacer el amor, no la guerra. Hace algunos años un hotel de paso era sinónimo de tugurio de mala muerte, un lugar escondido y obscuro, donde todos entraban de incógnitos para no ser reconocidos. Se tenía el prejuicio de que a los moteles sólo entraban los pinta-cuernos y que son lugares sucios o descuidados donde se puede correr cualquier tipo de riesgo.

Ahora las cosas han cambiado, ya que los nuevos moteles, conocidos ya como Love Hotels, se deben apegar a los más altos estándares de higiene, te brindan seguridad y privacidad y los niveles de servicio se asemejan a cualquier tipo de hotel. Esto sin mencionar los extraordinarios espacios ambientados con el mejor interiorismo y con atracciones que garantizan el goce y disfrute del momento con tranquilidad, diversión y un toque de lujo.

A todos nos encanta el sexo, y en un motel del amor, se puede lograr tener más intimidad que en casa, alejándonos de cualquier situación de estrés. En un Love Hotel, puedes disfrutar del servicio a la habitación, de una cama extraordinaria, de un jacuzzi, una alberca o incluso de elementos como un tubo que permiten añadirle emoción a tu vida sexual. Definitivamente los hoteles de paso han cambiado, ahora los moteles ofrecen el espacio ideal para dar rienda suelta a los más altos placeres de una forma diferente. Ir a un motel del amor, es un sitio neutral, donde todo puede ser desconocido, por tanto, es el lugar ideal para romper la rutina.